El fentanilo es un opioide sintético que se utiliza para tratar el dolor intenso, especialmente en pacientes que están experimentando dolor crónico o que han sido sometidos a una cirugía importante. Sin embargo, su abuso y uso indebido han aumentado en los últimos años, lo que ha llevado a una crisis de salud pública en todo el mundo. En este artículo, exploraremos los peligros de cómo su uso puede afectar a las personas de diferentes maneras.
¿Qué es el fentanilo?
El fentanilo es un analgésico opioide sintético que es mucho más potente que la morfina. Fue desarrollado por primera vez en 1959 por la compañía farmacéutica belga Janssen Pharmaceutica. Desde entonces, se ha utilizado ampliamente en la práctica médica para tratar el dolor intenso. Actúa en el sistema nervioso central para bloquear los receptores de dolor, lo que produce una sensación de alivio.
¿Cuáles son los peligros del fentanilo?
Aunque el fentanilo es efectivo para tratar el dolor intenso, también es muy peligroso cuando se abusa o se usa incorrectamente. La sobredosis puede ser fatal. Al igual que otros opioides, el fentanilo es altamente adictivo y puede provocar dependencia física y psicológica. Las personas que la usan recreativamente están en un mayor riesgo de sufrir una sobredosis, ya que es difícil controlar la dosis y la pureza del fentanilo que se vende en el mercado negro.
¿Cómo se usa?
El fentanilo se usa en varios tipos de formulaciones. Puede administrarse como una inyección intravenosa, un parche transdérmico, un comprimido sublingual o una pastilla para chupar. En todos los casos, se utiliza para tratar el dolor agudo o crónico. Sin embargo, su potencia y eficacia también lo hacen susceptible al abuso y al uso indebido.
¿Cómo afecta el fentanilo al cerebro y al cuerpo?
Actúa en el sistema nervioso central para bloquear los receptores de dolor. También produce una sensación de euforia y relajación, lo que puede llevar a la adicción. Cuando se abusa del analgésico, puede producir efectos secundarios graves, como la depresión respiratoria, que puede llevar a la muerte. También puede afectar la cognición y el juicio, lo que aumenta el riesgo de accidentes de tráfico y otros tipos de lesiones.
