San Mateo Atenco refuerza su compromiso con el medio ambiente y la salud pública con la instalación de un segundo biodigestor en el Rastro Municipal. La presidenta municipal, Ana Aurora Muñiz Neyra, encabezó el acto de entrega, destacando el impacto ambiental y social de esta tecnología.
Durante el evento, la alcaldesa subrayó que el nuevo sistema permitirá captar hasta 10 toneladas de residuos orgánicos. Principalmente, procesará la sangre generada en la actividad cárnica, evitando su vertido en cuerpos de agua como el Río Lerma. Además, el biodigestor producirá biogás y lixiviados, reutilizables como fertilizantes naturales en las zonas agrícolas del municipio.

Modernización con tecnología israelí y cooperación interinstitucional
La implementación del biodigestor refleja un trabajo conjunto entre distintos niveles de gobierno y actores sociales. La tecnología, de origen israelí, se ajusta a las normas sanitarias y ambientales nacionales, y marca un hito en la modernización del rastro municipal.
El proyecto contó con la colaboración del gobierno municipal, la Secretaría de Salud del Estado de México, la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios del Estado de México (COPRISEM), y la Unión de Tablajeros de San Mateo Atenco.
Jesús Rodríguez Ordóñez, jefe de la Jurisdicción Sanitaria 16 del Instituto de Salud del Estado de México, reconoció la iniciativa del gobierno local. Afirmó que acciones como ésta “trascienden en favor de la salud de las familias”, al garantizar carne procesada en condiciones limpias, seguras y sustentables.

Modelo replicable para otros municipios
En su intervención, Ana Muñiz Neyra reafirmó su compromiso con las autoridades sanitarias y ambientales. Aseguró que su gobierno ha trabajado para cumplir con la normatividad vigente y transformar el rastro municipal en un modelo que pueda ser replicado por otros municipios.
El acto también sirvió para formalizar una colaboración intermunicipal. La presidenta municipal entregó al presidente de los tablajeros de Otzolotepec el proyecto técnico-operativo del biodigestor. Este gesto busca fomentar el intercambio de buenas prácticas y extender el impacto positivo de la tecnología sustentable.
Entre los asistentes estuvieron representantes del sector salud, medio ambiente y agrupaciones de tablajeros de ambos municipios. La presencia de estos actores refuerza el carácter colaborativo del proyecto y su potencial de réplica a nivel regional.
